Hay un fusilado que vive
Eva Rodríguez
Entrevistamos a Mario Salvado documentalista argentino sobre su último trabajo.


Hablamos con Mario Salvado, realizador audiovisual, Ddocumentalista, diseñador de sonido y docente. Nacido en Llavallol, Pcia. de Buenos Aires, participó en el largometraje documental "Gaviotas Blindadas, historias del PRT-ERP". Luego siguieron los documentales Siga Ruta, 2010, La Educación Prohibida, 2012, La Chispa, 2013, Buscamos Vida, los crímenes del ejército en campo de mayo, 2014 y Agárrese como pueda, qué dicen los cuerpos al volar, 2016. En esta entrevista nos relata las motivaciones y algunas reflecciones sobre su último trabajo “Hay un fusilado que vive…”, estrenado en 2018.

—¿Que buscas reflejar con el documental sobre los fusilados de José León Suarez?
—En el año 2016 cuando se cumplían 60 años de los fusilamientos de José León Suárez (10 de junio), la Comisión por la Memoria, Verdad y Justicia de General San Martín nos propone hacer un corto audiovisual para trabajar el tema con las escuelas del partido. A partir de ahí empezamos a investigar con mayor profundidad y llegamos a la primera versión del documental “Hay un fusilado que vive…”, que se proyectó en el Centro Cultural Plaza (espacio cultural del municipio en el centro de San Martín) con funciones continuas para varias escuelas y público en general. Fue tan grande la repercusión, y a partir de ahí surgieron otras preguntas, sobre los hechos del bombardeo a Plaza de Mayo en 1955, en el derrocamiento del gobierno de Perón, entonces decidimos continuar y extender el trabajo agregando mucho más contexto histórico para poder entender ¿cómo se llega a los fusilamientos? y ¿por qué?. Los muertos en José León Suárez fueron 5: Mario Brión, Nicolás Carranza, Francisco Garibotti, Carlos Alberto Lizaso y Vicente Damían Rodríguez. Nos encontramos con que muchísima gente de diferentes edades, que viven muy cerca de donde ocurrieron todos estos hechos, ven con gran asombro el documental, ya que desconocen todo esto. Lo mismo nos pasó en el 31° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata cuando presentamos la película y luego de las proyecciones la gente se quedaba con nosotros charlando y preguntándonos sobre esta historia. Tuvimos la suerte que también nos acompañen algunos de los hijos de los fusilados como Berta Carranza (hija de Nicolás Carranza), que también fue parte de las funciones y las charlas con el público.

— Generalmente este hecho se enmarca como el inicio de la resistencia peronista ¿existieron a tu parecer en la historia argentina suceso similares o que se vinculen o lo entendés como algo inédito en el proceso de luchas de nuestro pueblo?
— Creo que por la magnitud y la importancia que tiene el peronismo en la historia Argentina, podemos decir que es un hecho inédito. Pero tenemos que tener en cuenta que la resistencia peronista se inicia el 16 de septiembre de 1955, en el mismo momento que Perón es derrocado por la autoproclamada “Revolución Libertadora” conducida por los generales Lonardi, Aramburu y el almirante Rojas. Pensemos que en marzo de 1956 esta dictadura promulgaba el decreto ley 4161, que prohibía al “Peronismo”, por lo tanto siempre se persiguió al pueblo trabajador de diferentes maneras a través de nuestra historia. También podemos citar las luchas llevadas adelante por diferentes organizaciones políticas desde el “Cordabazo” en mayo de 1969 y durante la década del ’70.



— ¿Crees que hubo diversas influencias que luego optaron por otros caminos, a veces contradictorios entre sí?
— Respecto a la resistencia peronista, creo que Perón manejaba las estrategias desde el exilio, y la aparición de la figura de John William Cooke, juega un papel muy importante haciendo llegar la palabra del líder a la gente que escuchaba y cumplía esas consignas para tratar de resistir y sobrevivir a todo este periodo que el peronismo estuvo proscripto hasta 1973, que volvió a ser gobierno.

—Se conoce bastante sobre la participación de militares pero no tanto sobre los civiles ¿que nos podes decir de ellos?
—En realidad se conoce poco de todos los hechos de junio de 1956 y de sus mártires ya sean militares y civiles. Mucha gente conoce el gran libro de Rodolfo Walsh “Operación Masacre”, que cuenta los hechos ocurridos en los basurales de José León Suárez en junio de 1956, escuchando la historia del fusilado que vive, Juan Carlos Livraga, quien fue unos de los que sobrevivió a la masacre y contó lo sucedido. Hoy en día, 64 años después, es el único sobreviviente que se encuentra vivo con sus 88 años, aunque no reside en la Argentina.

— El movimiento que fue masacrado con los fusilamientos ¿podría haber cambiado el rumbo del golpe o fue utilizado por la dictadura como un ejemplo sangriento para aplacar otro intento?
— En realidad el movimiento estaba totalmente infiltrado, por lo tanto la dictadura sabía todo, los dejó actuar para luego caerles encima, dar un escarmiento al pueblo y que todo el mundo quedara aterrorizado. La única consigna que tenía esa dictadura era el odio y la revancha. Por eso y para eso masacraron a estos hombres.


Hablamos con Mario Salvado, realizador audiovisual, Ddocumentalista, diseñador de sonido y docente. Nacido en Llavallol, Pcia. de Buenos Aires, participó en el largometraje documental "Gaviotas Blindadas, historias del PRT-ERP". Luego siguieron los documentales Siga Ruta, 2010, La Educación Prohibida, 2012, La Chispa, 2013, Buscamos Vida, los crímenes del ejército en campo de mayo, 2014 y Agárrese como pueda, qué dicen los cuerpos al volar, 2016. En esta entrevista nos relata las motivaciones y algunas reflecciones sobre su último trabajo “Hay un fusilado que vive…”, estrenado en 2018.

—¿Que buscas reflejar con el documental sobre los fusilados de José León Suarez?
—En el año 2016 cuando se cumplían 60 años de los fusilamientos de José León Suárez (10 de junio), la Comisión por la Memoria, Verdad y Justicia de General San Martín nos propone hacer un corto audiovisual para trabajar el tema con las escuelas del partido. A partir de ahí empezamos a investigar con mayor profundidad y llegamos a la primera versión del documental “Hay un fusilado que vive…”, que se proyectó en el Centro Cultural Plaza (espacio cultural del municipio en el centro de San Martín) con funciones continuas para varias escuelas y público en general. Fue tan grande la repercusión, y a partir de ahí surgieron otras preguntas, sobre los hechos del bombardeo a Plaza de Mayo en 1955, en el derrocamiento del gobierno de Perón, entonces decidimos continuar y extender el trabajo agregando mucho más contexto histórico para poder entender ¿cómo se llega a los fusilamientos? y ¿por qué?. Los muertos en José León Suárez fueron 5: Mario Brión, Nicolás Carranza, Francisco Garibotti, Carlos Alberto Lizaso y Vicente Damían Rodríguez. Nos encontramos con que muchísima gente de diferentes edades, que viven muy cerca de donde ocurrieron todos estos hechos, ven con gran asombro el documental, ya que desconocen todo esto. Lo mismo nos pasó en el 31° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata cuando presentamos la película y luego de las proyecciones la gente se quedaba con nosotros charlando y preguntándonos sobre esta historia. Tuvimos la suerte que también nos acompañen algunos de los hijos de los fusilados como Berta Carranza (hija de Nicolás Carranza), que también fue parte de las funciones y las charlas con el público.

— Generalmente este hecho se enmarca como el inicio de la resistencia peronista ¿existieron a tu parecer en la historia argentina suceso similares o que se vinculen o lo entendés como algo inédito en el proceso de luchas de nuestro pueblo?
— Creo que por la magnitud y la importancia que tiene el peronismo en la historia Argentina, podemos decir que es un hecho inédito. Pero tenemos que tener en cuenta que la resistencia peronista se inicia el 16 de septiembre de 1955, en el mismo momento que Perón es derrocado por la autoproclamada “Revolución Libertadora” conducida por los generales Lonardi, Aramburu y el almirante Rojas. Pensemos que en marzo de 1956 esta dictadura promulgaba el decreto ley 4161, que prohibía al “Peronismo”, por lo tanto siempre se persiguió al pueblo trabajador de diferentes maneras a través de nuestra historia. También podemos citar las luchas llevadas adelante por diferentes organizaciones políticas desde el “Cordabazo” en mayo de 1969 y durante la década del ’70.



— ¿Crees que hubo diversas influencias que luego optaron por otros caminos, a veces contradictorios entre sí?
— Respecto a la resistencia peronista, creo que Perón manejaba las estrategias desde el exilio, y la aparición de la figura de John William Cooke, juega un papel muy importante haciendo llegar la palabra del líder a la gente que escuchaba y cumplía esas consignas para tratar de resistir y sobrevivir a todo este periodo que el peronismo estuvo proscripto hasta 1973, que volvió a ser gobierno.

—Se conoce bastante sobre la participación de militares pero no tanto sobre los civiles ¿que nos podes decir de ellos?
—En realidad se conoce poco de todos los hechos de junio de 1956 y de sus mártires ya sean militares y civiles. Mucha gente conoce el gran libro de Rodolfo Walsh “Operación Masacre”, que cuenta los hechos ocurridos en los basurales de José León Suárez en junio de 1956, escuchando la historia del fusilado que vive, Juan Carlos Livraga, quien fue unos de los que sobrevivió a la masacre y contó lo sucedido. Hoy en día, 64 años después, es el único sobreviviente que se encuentra vivo con sus 88 años, aunque no reside en la Argentina.

— El movimiento que fue masacrado con los fusilamientos ¿podría haber cambiado el rumbo del golpe o fue utilizado por la dictadura como un ejemplo sangriento para aplacar otro intento?
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