Crece la red de supermercados cooperativos
Pablo Buseti
Esta red de locales generan empleos dignos y seguros, contribuyendo de manera concreta a la economía de cientos de miles de familias que se abastecen a precios justos de un amplio surtido, que supera las cinco mil referencias, en la sumatoria de sus productos.


Puesta en marcha en 2016, la Central de Compras de la Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (CCFacc) continúa con la evolución planificada por el Consejo de Administración.

Sin lugar a dudas, se trata de la acción de integración económica más trascendente de las últimas décadas impulsada por la Federación que, a nivel nacional, nuclea a las cooperativas y mutuales de consumo con anclaje en localidades de nueve jurisdicciones provinciales.

En este momento, se abastecen en la CCFacc 32 cooperativas y mutuales de consumo o con sección consumo, que suman 211 supermercados, ubicados en 128 localidades de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Fe, Santiago del Estero y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El surtido de la CCFacc incluye productos almacén seco, bebidas, limpieza, perfumería y artículos del hogar. Está compuesto por los artículos que ofrecen las cooperativas de producción y/o trabajo, los productos marca Cooperativa, Ecoop y Coop. Asimismo, el surtido se completa con los productos de otros proveedores que posibilitan contar con un surtido más amplio para satisfacer las necesidades de sus asociados.

Esta red de locales generan empleos dignos y seguros, contribuyendo de manera concreta a la economía de cientos de miles de familias que se abastecen a precios justos de un amplio surtido, que supera las cinco mil referencias, en la sumatoria de sus productos.

A su vez, entre los proveedores de la CCFacc hay más de 30 cooperativas de producción y/o trabajo, localizadas en las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Misiones, Santa Fe y San Luis, que ofrecen actualmente alrededor de 650 productos.

La Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (FACC) continúa realizando activas gestiones para incorporar a nuevas cooperativas proveedoras que se integren al proyecto de su Central de Compras.


Marcas líderes
En 2016 la dirigencia de la Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (FACC) planteaba que “el propósito final de esta Central de Compras (CCFacc) es aportar al crecimiento del sector cooperativo a través de una herramienta tan simple y efectiva aunque no siempre bien empleada como es la integración cooperativa”, y que además “este esfuerzo de integración que representa la CCFacc constituye una oportunidad de crecimiento tanto en eficiencia, competitividad como en participación de mercado”.

Un desafío reclamado por las entidades asociadas a la FACC era el de incorporar al surtido de la CCFacc los productos de las marcas líderes.
El principal problema que se debió superar fue la reticencia de las grandes empresas a aceptar la modalidad operativa de la CCFacc. Es decir, entregar y facturar directamente a las cooperativas y/o mutuales adheridas al sistema, respetando además los precios y condiciones de compra de la Cooperativa Obrera Ltda. de Consumo y Vivienda, con sede legal en la ciudad de Bahía Blanca.
Esta traba se logró superar con la desinteresada colaboración de esta última, que actúa en estos casos como un proveedor mayorista de la CCFacc y atiende los pedidos que formulan las diferentes cooperativas y mutuales adheridas al sistema, las que adquieren los productos de marcas líderes a través del Portal de la CCFacc, sin intermediación de terceros, y al mismo precio de costo neto de la Cooperativa Obrera, más impuestos.

Las mercaderías se entregan por la CCFacc en un operador logístico ubicado en el Gran Buenos Aires y cada cooperativa o mutual resuelve a su conveniencia la contratación del transporte hasta sus respectivas sedes, con los costos logísticos a su cargo.

De esta forma las cooperativas y mutuales vuelven a innovar y demostrar su vocación social y de servicio, en un accionar permanente de defensa de la economía familiar, especialmente de quienes menos recursos disponen, haciendo una concreta contribución más a la lucha contra la pobreza.


Frente a otros modelos empresarios que privilegian el lucro, las cooperativas y mutuales ratifican su condición de empresas diferentes, preocupadas por la construcción de una sociedad más justa, más equitativa y más pacífica, porque como lo señalara Naciones Unidas al declarar al 2012 como el Año Internacional de las Cooperativas, son “empresas que construyen un mundo mejor”.

Puesta en marcha en 2016, la Central de Compras de la Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (CCFacc) continúa con la evolución planificada por el Consejo de Administración.

Sin lugar a dudas, se trata de la acción de integración económica más trascendente de las últimas décadas impulsada por la Federación que, a nivel nacional, nuclea a las cooperativas y mutuales de consumo con anclaje en localidades de nueve jurisdicciones provinciales.

En este momento, se abastecen en la CCFacc 32 cooperativas y mutuales de consumo o con sección consumo, que suman 211 supermercados, ubicados en 128 localidades de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, Neuquén, Río Negro, Santa Fe, Santiago del Estero y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

El surtido de la CCFacc incluye productos almacén seco, bebidas, limpieza, perfumería y artículos del hogar. Está compuesto por los artículos que ofrecen las cooperativas de producción y/o trabajo, los productos marca Cooperativa, Ecoop y Coop. Asimismo, el surtido se completa con los productos de otros proveedores que posibilitan contar con un surtido más amplio para satisfacer las necesidades de sus asociados.

Esta red de locales generan empleos dignos y seguros, contribuyendo de manera concreta a la economía de cientos de miles de familias que se abastecen a precios justos de un amplio surtido, que supera las cinco mil referencias, en la sumatoria de sus productos.

A su vez, entre los proveedores de la CCFacc hay más de 30 cooperativas de producción y/o trabajo, localizadas en las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Misiones, Santa Fe y San Luis, que ofrecen actualmente alrededor de 650 productos.

La Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (FACC) continúa realizando activas gestiones para incorporar a nuevas cooperativas proveedoras que se integren al proyecto de su Central de Compras.


Marcas líderes
En 2016 la dirigencia de la Federación Argentina de Cooperativas de Consumo (FACC) planteaba que “el propósito final de esta Central de Compras (CCFacc) es aportar al crecimiento del sector cooperativo a través de una herramienta tan simple y efectiva aunque no siempre bien empleada como es la integración cooperativa”, y que además “este esfuerzo de integración que representa la CCFacc constituye una oportunidad de crecimiento tanto en eficiencia, competitividad como en participación de mercado”.

Un desafío reclamado por las entidades asociadas a la FACC era el de incorporar al surtido de la CCFacc los productos de las marcas líderes.
El principal problema que se debió superar fue la reticencia de las grandes empresas a aceptar la modalidad operativa de la CCFacc. Es decir, entregar y facturar directamente a las cooperativas y/o mutuales adheridas al sistema, respetando además los precios y condiciones de compra de la Cooperativa Obrera Ltda. de Consumo y Vivienda, con sede legal en la ciudad de Bahía Blanca.
Esta traba se logró superar con la desinteresada colaboración de esta última, que actúa en estos casos como un proveedor mayorista de la CCFacc y atiende los pedidos que formulan las diferentes cooperativas y mutuales adheridas al sistema, las que adquieren los productos de marcas líderes a través del Portal de la CCFacc, sin intermediación de terceros, y al mismo precio de costo neto de la Cooperativa Obrera, más impuestos.

Las mercaderías se entregan por la CCFacc en un operador logístico ubicado en el Gran Buenos Aires y cada cooperativa o mutual resuelve a su conveniencia la contratación del transporte hasta sus respectivas sedes, con los costos logísticos a su cargo.

De esta forma las cooperativas y mutuales vuelven a innovar y demostrar su vocación social y de servicio, en un accionar permanente de defensa de la economía familiar, especialmente de quienes menos recursos disponen, haciendo una concreta contribución más a la lucha contra la pobreza.


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